«Contento de ser curioso» un divague luduraniano

curioso

Harto ya de estar harto, ya me cansé, de preguntar al mundo por qué y porqué, la rosa de los vientos me ha de guiar y ahora vais a verme…vagabundear !!! cantaba Serrat y suscribo, y en esta media tarde lluviosa en Buenos Aires, quiero hacerlos cómplices de este divague vagabundo…«Contento de ser curioso»

Era callejero por derecho propio !!! cantaba Cortés y suscribo y me acuerdo de mi abuela diciéndome..»Luisito no seas tan callejero, no vayas vagubundeando por ahí» y en este momento siento y pienso que callejear y vagabundear son la bohemia que me ha dado identidad, ayer el luisito y hoy el luduran, y esto me pone contento.

El callejero vagabundear es una actitud filosófica que traducida llamamos curiosidad, por el mundo, por las cosas, por las personas, por todo esto que existe y que nos incluye, es una actitud de vida, un permanente observar y reflexionar, hacia afuera y hacia adentro de uno, para pescar «cómo funcionan las cosas», lo más valioso que tenemos es nuestra curiosidad y esta no envejece como da cuenta la foto del post, querer saber si detrás del cuadro se «ven la tetas de la modelo».

Desde la edad de los porqués, y aún antes somos curiosos, por que buscamos las propias respuestas y las cotejamos con las que nos dieron, por eso vagabundeamos, para ser nosotros mismos…eternautas…callejeros, vagabundos, navegantes, internautas…la web es el espacio como la calle y las redes sociales el encuentro con otros curiosos feibuceros, tuiteros en un mundo de piratas, bucaneros y filibusteros de los que «nos grabamos en la piel a la reina del burdel y la llevamos a recorrer el mundo».

El ser curiosos nos explica como personas y orienta nuestras búsquedas hacia el placer, hacia las elecciones de vida, hacia nuestras vocaciones, hacia el encuentro de nuestro lugar en el mundo, el que nos haga feliz con lo que hacemos y aquí es cuando nos ponemos contentos.

Un profesor de filosofía nos decía…»muchachos, la contentez es la característica filosófica de haber encontrado la propia vocación, ya la contentez se llega desde la curiosidad «, a mi me llevo a la docencia, a la psicología social, a los medios de comunicación, a la web y las redes sociales y a la política…y por eso celebro estar «contento de ser curioso».

Posdata: No se ven las tetas detrás del cuadro, pero vale la pena intentarlo, por que todo curioso contento es un adorable pícaro !!! chan..chan…y como el enmascarado no se rinde y para hacer honor a La política al poder, es mejor ser un adorable pícaro que un «crispado conflictivo» (palito para …)